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400gr. Leche condensada
120gr. Harina con levadura
70gr.Mantequilla
4 Huevos
Cerezas en almibar
Cacao en polvo
Azucar glacé
Almendras
Piñones
Nueces
PREPARACIÓN
En primer lugar, ponemos la mantequilla en un vaso y la derritimos en el microondas.
Seguidamente, la mezclamos bien con la leche condensada, añadimos los huevos y los batimos
uno a uno.
A continuación incorporamos la harina, hasta que quede todo bien mezclado y después cortamos
las nueces a trocitos y las echamos en la masa.
Engrasamos un molde con mantequilla, lo espolvoreamos con harina y quitamos la sobrante.
Llenamos el molde con la mezcla, le ponemos unos cuantos piñones, unas cuantas almendras fileteadas,
lo introducimos en el horno, préviamente precalentado y lo cocemos a fuego medio, durante unos 40 minutos aproximadamente a 180º.
Para saber cuando está a punto de cocción, pincharlo con la punta de un cuchillo y cuando éste salga seco, ya está listo. En caso de que se abra el horno para comprobar el proceso, evitar cerrarlo
demasiado rápido, pués impediría que el tronco subiera lo suficiente.
Finalmente, lo desmoldamos y lo decoramos espolvoreandolo con una mezcla puesta en un colador,
de cacao en polvo y azucar glacé. Le hacemos los ojos con piñones, para que quede con aspecto
terrorífico, la columna con las cerezas en almibar y ya estará listo para salir a asustar dulcemente, a los comensales.
Y ya sólo falta desear, que os guste y os aproveche...
Y ya sólo falta desear, que os guste y os aproveche...
2 comentarios:
Hola Ángela, has conseguido que el pastel tenga una pinta “horrorosa”, seguro que si te lo comes tendrás un dolor de estomago espantoso.
Bromas aparte, de verdad que te los has “currado” y tiene que estar de "miedo".
Un abrazo. Juanjo
Querido Juanjo !
He de confesarte que soy más de panellets,castañas y boniatos,(en definitiva, cosas nuestras como la tradicional castañada de "Todos los Santos"), que
no de modas importadas como la de Halloween, pero como me sirve de pretexto para publicar una nueva receta, también me acojo a ella.
Además, a los niños seguro que les hace más gracia un "dulce monstruito", que unas castañas y boniatos.
En esta ocasión no, me pides consejo sobre que vino tomar, pero como ya se ha convertido en un clásico, lo voy a hacer.
Yo lo acompañaría con un buen Moscatel, o incluso para darle un contraste al dulce, un vino Generoso seco (Jerez, Montilla, Manzanilla, etc.)
Besos,
Àngela
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